Empieza la historia. Seis pibes del club deciden hacer esta actividad y el señor presidente al enterarse, impone su ley, “si van seis pibes, tienen que ir seis pibas”.
Y buscando pibas, que encuentran, seis “señoras” y que deciden, nos vamos pa la playa.
Y las señoras que deciden, buscar a otros, ¿dónde?, en la sección de la tercera edad del Club, y como no había otra cosa, pues pa La Gomera.
Así, la marca blanca del “inserso”, partía para La Gomera, siendo:
Manolo
el inquieto, que es como un bebé sin pañales correteando con libertad e intentando silbar, pero pendientes de no mojar a nadie.
Ernesto
el moldeado, que como era el presidente, nadie se atrevía a decirle que no podía ir, menos su mujer.
Paco
el 4x4, el caso contrario de Ernesto, que no quería ir y su mujer le obligó.
Benigno el sin-dientes, que nadie sabia si era peor que se quitara la camiseta o se riera, menos mal que alternaba.
Miguel
el corto, que no se sabía si era tonto por las tonterías que decía o de tantas tonterías se volvió tonto.
Jose
el piel roja, un aprendiz explorador, con pluma, arco y flechas, con muy mala puntería y que le costaba encontrar el norte.
Marisa
la meiga, que controló al piel roja para que no perdiera el norte y que no matara a nadie con las flechas.
Milagros
la viajera, su sueño de mayor, recorrer mundo, ya tiene 23 libros de “Dora la Exploradora”.
Mary
la sin techo, caso parecido al de Paco, la mandó el marido pensando que el viaje era de 6 meses, menudo disgusto al enterarse que solo eran cuatro días.
Candy
La sonrisas, que descubrió dos cosas, que hay vida después de los centros comerciales y que Ernesto lleva un régimen demasiado estricto.
Lola
la habladora, una especie animal, que no consigue caminar si habla, pero si caminara como habla, tendría como 300 vueltas al mundo.
Yaiza
la gacela canaria, que por sus problemas en el dentellado, comía todo triturado o con pajita.
¿ Y consiguieron su objetivo ?
* Día 1.- Todos puntuales en el aeropuerto y comenzamos, foto, foto, foto… y ya en el mostrador, Lola quería su tarjeta de embarque la primera por si quedaba en tierra, después perdería su DNI, pero gracias a su “foto”, la gente la reconoció y localizó rápidamente, pensando que era una cartilla veterinaria.
En el avión, por lo bien que se portaron, les dieron una chocolatina, que la gacela y el sin dientes, podían chupar y el corto se enteró tarde que tenía que quitar el papel.
Luego, a la guagua, dirección San Sebastián de La Gomera, y en el alojamiento a esperar, dado que le dejaron al corto la organización y no sabía si las mochilas se dejaban dentro o fuera del alojamiento, se arregló y a caminar…. “Pa ArriBa”…. , y a los 2 minutos, alguna ya pensaba en abandonar, otras en el lío que se metieron, otro sin camisa y sin piercing en los pezones y otros intentando animar al resto a caminar, esperando alguna sombra que no llegaría.
Y en la última subida, hasta al piel roja se le cayó la pluma, pero gracias a la escoba de la meiga, pudo subir, terminando la sonrisas cojeando pero riendo y la habladora al ritmo del chikilicuatre.
Luego a comer en la Degollada Peraza, con unas buenas vistas. Lola organizando la comanda, bajo la intensa mirada de Candy, las dudas de Mary y Milagros para comer y Yaiza pidiendo la comida triturada, mientras Marisa le dice a Jose lo que tiene que comer y el resto observando perplejos el control de las señoras.
El regreso a San Sebastián de La Gomera, la sonrisas, el corto y la habladora, se metieron en un coche sin preguntar, el moldeado, en un licencia municipal ante la cara perpleja del conductor, menos mal que era bajada, y el resto en una guagua, donde al sin dientes lo dejaron sentado en el suelo para que no mordiera a nadie.
Se cierra la tarde en la iglesia, donde se les informan que no tienen cura ni remedio, pero que no perdieran la Fe. Primera etapa superada.
* Día 2.- Volvemos a lo mismo, todos a las 07:00 preparados pero dejan al corto la organización y los taxis por un lado y el grupo por otro, menos mal que los taxistas conocían las calles y los localizaron.
Y al punto de partida, acordando hacer un pago único a los taxistas, pero la meiga mucho de bruja pero poco de oido, pagando doble dicho servicio que se solucionó posteriormente, buena gente los gomeros.
Luego viento, frio, mucha subida, y pasando por parte del Garajonay para llegar a la cima de la Isla y demostrar cómo la edad no es un límite para caminar, es límite para otras cosas que no podemos contar.
Después, llegaría la bajada que sorprendería por el calor y donde pasamos por la fortaleza, una explanada en altura, que la gacela salió como una loca a conquistar, y el corto pensando que regalaban algo la siguió, y como el inquieto no quería quedarse atrás, finalizando la ruta todo el grupo en Chipude.
* Día 3.- La meiga se encargó de los taxis y todo salió mejor que con el corto y partieron para el punto de salida, era tanta la ilusión del grupo de terminar, que no se hicieron la foto de salida, cada uno salió como alma que lleva el diablo… y que paso, pues, del sin dientes desapareció, se equivocó y se teletransportó al punto de llegada.
El 4x4, quiso demostrar de lo que era capaz, imponiendo un ritmo fuerte y cargando con el corto, con la sorpresa de la gacela canaria, que los seguía y no les dejaba ni para mear, llegando juntos al final de etapa.
Por otro lado, el piel roja, tomó el papel de explorador y apache protector, y condujo a la meiga, la sin techo y a la viajera exploradora hasta el fin de ruta.
Y la sonrisas, la habladora, el moldeado y el inquieto, realizaron el recorrido juntos hasta “casi el final” ya que aparecieron la habladora y la sonrisas en un coche, donde aprovecharon para intercambio de teléfono y el moldeado y el inquieto por otro lado.
Y todos contentos.. “A COMER” y llega el corto y dice, “hay que llegar a la playa”, poco mas de 3 kilómetros más, y sale el dedo corazón de la habladora y la sonrisas que lo decían todo, así como la meiga y el piel roja que querían dormir.
Pues el resto, a caminar hasta la playa, consiguiendo su objetivo, para posteriormente hacer lo mismo la Marisa y Jose. Después cena con tertulia de la sana y a dormir que al día siguiente se regresaba.
Y así el último día, la guagua 1844 que no llega y todos mirando al corto, y el corto que no da para más, dice, pues nos vamos en taxis, y gracias a los taxis de Vallehermoso, consiguieron llegar a tiempo para coger el vuelo a Gran Canaria, desconociendo si llegó la famosa guagua contratada, pero pudiendo ver como el piloto que no pilota de binter es capaz de quitarle la sonrisa a Candy.
Ya en Gran Canaria, se consiguió disgregar el grupo para el descanso de tod@s.
Conclusiones del viaje:
-- Que la habladora, tiene que llevar un parche en la boca para caminar.
-- Que la sonrisas, solo es cuando esta en tierra, en el aire es la seria.
-- Que la sin techo, le aguantan poco en casa.
-- Que la viajera, tiene que seguir comprando libros de Dora La Exploradora.
-- Que la meiga, con una escoba en la mano, no hay quien la coja.
-- Que la gacela canaria, tiene que viajar con un triturador de comidas.
-- Que el inquieto, no puede ir suelto, hay que llevarlo con correa.
-- Que el piel roja, puede pasar de nivel, pero sin flechas.
-- Que el moldeado, utiliza una dieta especial para su formación.
-- Que el 4x4, sí caminara derecho, rompería menos zapatillas.
-- Que el sin dientes, no puede salir sin dentadura ni sin camisa.
-- Que el corto, es corto organizando pero no tanto para las tonterías.
Gracias a la empresa colaboradora por su aportación.
-Video autorizado por la protectora de animales-